2008-08-27

Sobre dos ruedas



Hace semanas me está rondando la cabeza la idea de comprarme una bicicleta. La idea no es nueva, hace meses ya a mi Monuna -en gesto más que noble- se le había ocurrido comprárnoslas para salir a pasear. La verdad es que hace rato las hubiera comprado si no fuera porque con esto de la tesis estoy más ajustado que pantalón de torero.

¿Por qué una cleta? Pues la verdad es que no lo sé. Más allá de la monería de tener algunos amigos y amigas que tienen una, pues creo que todo radica en el deleite que es montarte sobre esas dos ruedas y pasear sin el estrés que un vehículo a gasolina, gas o petróleo conlleva. Hacer deporte es algo que también está en la lista de razones, más aun cuando veo que este bajo vientre mío crece impía e irreverentemente sin importarle si mi figura cada vez se asemeja más a la de un kion. Por supuesto, también esgrimo aquello de no querer fregar más el medio ambiente; ya suficiente tenemos con el desgraciado parque automotor limeño (¡no creo que otra ciudad contamine el país tanto como ésta!). Dicho sea de paso, creo que mi "consciencia ambiental" cada vez mejora: desde valorar cada gota de agua que cae de los caños (léase: no desperdiciándola inútilmente) hasta el mero hecho de no tirar basura en la calle (no sólo por educación)... En fin...

Siendo aun más sincero, pues acaso muy en el fondo también quiera una bici para escapar. Escapar de la presión a la que, de alguna u otra manera -nos desempeñemos en lo que sea-, sucumbimos en algún momento. Montarme en mi cleta y pedalear... pedalear... pedalear... etcétera. Pedalear libre y orondo por una ciclovía o una pista, sin miedo a quedarme atascado en el asqueroso tráfico. Y con algo de suerte, tal vez sin miedo a quedarme estancado en lo que me impulsó a montar la bici y salir a despejarme. Como en una ciclovía: dejar atrás las rayitas del asfalto, árbol a árbol, poste a poste, cuadra a cuadra... Y (para sentirme un poquito mejor) llegar, no sé cuándo a no sé dónde... Tan sólo llegar.

2008-08-23

Todo Javier Prado (Parte 1)


Hace unas semanas, ya con la hora encima, veía mi biblioteca para ver qué me llevaba para irme leyendo en tremendo viaje. "Lecciones de Historia de la Filosofía", de Montemayor, fue el elegido. Ya en el paradero de la Cato, tomé la fidelísima y nunca tan bien ponderada "rica" Daewoo, la cual me llevaría hasta La Molina. La misión: recoger a mi sobrino.

Cierto es que nunca me ha disgustado hacer esos viajesotes -es más, los tenía que hacer para irme a la universidad, ya sea desde casa o desde el trabajo-, pues siempre hay algo que hacer en un micro: leer, escuchar música, dormir, ver a la gente que sube y baja del vehículo o (mi favorita) descansar tu cabeza en la ventana y pensar en millones de cosas. Esa vez leí. Para variar, lo que lees te deja pensando (a veces demasiado... inútilmente demasiado). Los pre-socráticos tuvieron la culpa.

Ese día pensé en cómo pasa el bendito/condenado tiempo y en cómo, con él, vienen los cambios. Los benditos/condenados cambios. Ayayay, Heráclito tenía razón: "todo cambia", con lo cual -como decía- "nadie se baña dos veces en un mismo río"; el devenir como dirían los filósofos. Y vaya que a veces sucede así: apenas uno gira el cuerpo, algo cambió. Pero eso no es lo peor de todo, lo peor es voltear esperando encontrar aquello que dejaste (a veces, aun cuando no quisiste hacerlo), llegar nuevamente y, por arte de magia, encontrar lo que dejaste... encontrarlo justo tal como estaba antes de abandonarlo. Pero no. He allí el inexorable cambio.

Ahora que lo pienso, ¿será acaso por ello que para Heráclito el fuego era la esencia de todas las cosas? Sí que sí. Porque una vez que enciendas algo, no esperes encontrar otra cosa que no sea cenizas.

2008-08-22

Otra de Heduardo...


Y, bueno, tengo que postear esta otra de Heduardo, que me pareció buenísima... Se refiere a las declaraciones que la Ministra de la Mujer, Susana Pinilla, diera a "El Comercio" el pasado domingo, respecto de Agustín Mantilla (dijo que, por referencias de su esposo, quien lo conoce era un tipo "honorable"). Bueno, esa folcrórica aseveración merecía su Heduardicidio, ¿no? Disfruten:

Fuente: Perú.21, 19 de agosto de 2008

2008-08-17

Un par de Heduardo para amenizar el blog


Ayayay, esto está demasiado gracioso como para no compartirlo. Son un par de Heduardicidios. Está como para recordarle a nuestro "Rey Sol" -como se le solía llamar a Luis XIV- lo terrenal y falible que sigue siendo. Buen provecho.


"Su majestad y la prensa" (En Perú.21 del 10 de agosto de 2008)

"La difícil reconstrucción del Presidente" (En Perú.21 del 16 de agosto de 2008)

2008-08-09

I now run... into the wild (and friendship)


"We are, finally, all wanderers in search of knowledge. Most of us hold the dream of becoming something better than we are, something larger, richer, in some way more important to the world and ourselves. Too often, the way taken is the wrong way, with too much emphasis on what we want to have, rather than what we wish to become"
De "Education of a Wandering Man", de Louis L'Amour

"For a moment, she re-discovered the purpose of her life. She was here in earth to grasp the meaning of its wild enchantment and call each thing by its right name"
De "Dr. Zhivago", de Boris Pasternak

"Such is the way of the world/ you can never know/ just where to put all your faith/ and how will it grow/ Gonna rise up/ burning back holes in dark memories/ Gonna rise up/ turning mistakes into gold"
De "Rise", tema de Eddie Vedder


Hace un par de semanas (chesu, cuando el buen Miguel todavía estaba acá en Perú), en una amical, buena y sana costumbre, Daniel, Miguel y yo nos juntamos para ver una pela que ya tiempo atrás habíamos estado esperando ver: "Into The Wild" (2007), opera prima de Sean Penn, historia llevada al ecran sobre la base del (homónimo) libro de Jon Krakauer. Con una genial fotografía y una pulida y recomendadísima banda sonora interpretada y compuesta -salvo dos temas- por Eddie Vedder (vocalista de Pearl Jam), esta pela -creo- no decepcionará a ninguno que esté abierto a la experiencia de sus, aproximadamente, 130 minutos de duración.

La pela -de la cual no daré muchos detalles, para no fregarles la función- narra la ____ (interesante, estúpida, valiente, ingenua, genial, irresponsable, fantástica, temeraria, aleccionadora, etc... pónganle el epíteto que quieran después de verla) historia de Christopher McCandless, un joven estadounidense de familia acomodada que, tras graduarse en Historia y Antropología en la Universidad de Emory, decide dejar atrás el mundo fatuo y materialista que lo rodeaba para ir en busca de lo que consideró su sueño mayor: adentrarse en las gélidas e impías tierras de Alaska, pero sobre todo buscar su verdad, encontrar paz espiritual, entrar en contacto con la naturaleza y ser consciente de ello.

Así, Alex Supertramp -nombre que adoptó durante su peripecia-, al mejor estilo de Huckleberry Finn, provisto de su celeste mochila de viajero, un poco de ropa, algunos libros, bolsillos vacíos de dinero pero repletos de sueños y aventura, viaja buena parte de Estados Unidos. En este viaje, Alex convive con la naturaleza en su más virginal forma, conociendo eventualmente a algunos personajes, en quienes logra calar por su sencillez y particulares sabiduría y filosofía de vida, influenciadas fuertemente por algunos de sus autores favoritos, tales como: Jack London, Leon Tolstoi y Henry David Thoreau, Louis L'Amour. A la vez, ellos también dejan en él muchas cosas que rescatar, dando testimonio de la interacción y retroalimentación con las demás personas, de la que ningún ser humano puede (ni debe) escapar, pero de la que Alex -de alguna manera- quiso estar exento o de la que, por lo menos temporalmente, en una suerte de introspección, quiso estar alejado.

Inmerso en una difícil situación, Alex Supertramp decide emprender el retorno tras casi 4 meses en Alaska (2 años en total, desde su partida de casa), influenciado por un fragmento que leyó en uno de los libros que llevó consigo y tras haber entendido que ninguna experiencia, verdad o felicidad o experiencia es lo que es si no hay nadie con quien compartirla... Y vaya que hay mucho de cierto en eso.

A propósito de ello, hace unos días se fue Miguel (el buen "Iiiimmmb!"), amigo, el otro pie del "trípode de las pelas", compañero de las pichangas de los miércoles y reuniones con la demás gente del cole, a hacer una mestría en Geografía en Bergen-Noruega. Quienes participamos de su despedida (una de las tantas) y el mismísimo Miguel, de alguna manera, nos dimos cuenta de qué tan cierto puede ser ese fragmento que "movió" a Supertramp a volver... Y, bueno, hoy, Miguel no está en Perú, sino casi a las antípodas; sin embargo, tanto él como nosotros, sus amigos, sabemos que ni todos esos kilómetros, que nos separarán por un tiempo, podrán con ese invaluable lazo que ni siquiera el hecho de terminar el cole rompió. Porque ésa es una de las cosas que cuando es fuerte (como lo es en este caso) permanece.

¡Éxitos! ¡Aquí te esperamos, Iiiimmmb!


eddie vedder - rise
Found at skreemr.com
(Pon play para escuchar "Rise", de Eddie Vedder)